Tipos de demonios


¿Qué son los demonios?

Las leyendas sobre ángeles y demonios estuvieron presentes en diferentes espacios y distintos tiempos durante siglos y siglos sin poder clasificarlos de alguna manera específica. Denominados como seres místicos, y también como seres terrenales, el número de los demonios supera por mucho a la cifra emblemática encontrada en la literatura cristiana; la marca de la bestia, el 666. Esto se debe a las distintas creencias de las jerarquías demoníacas según la tradición de la religión, el origen y su función entre otros.

(Los demonios son seres sobrenaturales malévolos)

(Los demonios son seres sobrenaturales malévolos)

Un demonio o daemon (del griego daimôn) es descripto como un ser sobrenatural, no humano, y malévolo para una gran porción del planeta. Sin embargo para los antiguos griegos, la palabra original “daimon” tenía  una concepción neutral, es decir, los demonios tanto buenos como malos. Mucho después se le atribuyó el sentido de maldad como en las religiones del Oriente donde fue, y es, considerado como espíritu impuro, el que puede posesionarse en una persona y solamente debe ser expulsado a través de un exorcismo.

Lo mismo ocurre en el Occidente. El demonio, también es considerado como una entidad espiritual maligna y como un ángel caído que puede ser conjurado y controlado.

Los demonios y sus clasificaciones

Los demonios tienen diversas clasificaciones. Éstas son algunas:

-De acuerdo a la tradición:

  • Mesopotamia. En la mitología caldea (semitas), los demonios eran conocidos como los siete dioses del mal, de nombre Shedu (demonios-tormenta) representados con el aspecto de toro alado.
  • Israel. Los demonios en este lugar eran considerados como espíritus de personas malvadas y que se suponía que entraban en los cuerpos de los vivos provocando enfermedades llegando a una muerte dolorosa.
  • Judaísmo. La demonología rabínica dividía a tres clases de demonios: los shedim (benévolos), los mazzikim (dañadores) y los ruhin (espíritus). Además de estos existían, los tiharire (espíritus del mediodía), los lilin (espíritus de la noche), los telane (espíritus de la tarde) y los zafrire (espíritus de la mañana).
  • Cristianismo. Conformado por la tríada opuesta a la católica (Padre, Hijo y Espíritu Santo) donde los tres demonios principales son Lucifer, el AntiCristo y el Falso Profeta.

-De acuerdo a los pecados capitales:

En 1589 Peter Binsfel, obispo y teólogo alemán conocido por ser uno de los mejores cazadores de brujas en el siglo XVI, decide publicar la lista autorizada de demonios o príncipes del infierno relacionados con los siete pecados capitales. Y ellos son los siguientes:

Orgullo (Lucifer). Del latín lux “luz” y fero “llevar” significa “portador de luz”. Este demonio, anteriormente arcángel, de características bellas se mantuvo vinculado al pecado ya que fue quien quería tener el mismo poder e incluso superar a su majestad, es decir, Dios. Luego de su rebelión fue enviado al mundo terrenal y su título de “portador de luz” fue cambiado al de “adversario”.

A este pecado se lo define como la sobrevaloración y la creencia de sentir que lo que se haga o diga es superior a todo lo que se encuentra alrededor.

Avaricia (Mammón). Mammón es un término arameo que significa riqueza. En el Nuevo Testamento, Mammón se personifica como la riqueza en los libros de Lucas y Mateo. Este demonio es similar al dios griego Hades y el dios romano Dis Pater ya que era el custodio de las abundancias de la tierra.

Este pecado incluye la deslealtad, la traición deliberada para beneficio personal, la búsqueda y acumulación de objetos, robo y asalto, los engaños, etc.

Ira (Satanás/Amón). Satán o Satanás es el nombre que las religiones abrahámicas señalan a un ente que representa la encarnación suprema del mal. Tiene a su cargo a cuarenta  legiones de demonios, y su función es contar las cosas del pasado y futuro. Su imagen es descripta como un  lobo con cola de serpiente que arroja fuego, un hombre con cabeza de cuervo y dientes de perro o simplemente un hombre con cabeza de cuervo.

Justamente este demonio fue elegido para representar a la ira ya que al rebelarse ante Dios surgió un sentimiento no ordenado y no controlado de odio y enojo.

Lujuria (Asmodeo). El origen del nombre de este demonio se remonta en la religión mazdeista de los persas, y es conocido por aparecer en el libro Tobías del Antiguo Testamento. La historia cuenta que Asmodeo, se enamora de Sara, hija de Raquel, y cada vez que contrae matrimonio, mata al marido llegando a un total de siete hombres. La “suerte” del demonio cambia cuando Tobías le propone casamiento a Sara, y mediante la ayuda de un arcángel aleja al mal espíritu.

La lujuria puede ser concebida con el intenso deseo sexual sobre otra persona, o los pensamientos posesivos hacia alguien más. Las consecuencias de este pecado a un grado mayor serían el adulterio, la violación y la adicción al sexo.

Gula (Belcebú). Nombre derivado de Baal Zebub o más exactamente Ba’al Z’vûv en hebreo cuyo significado es «señor de las moscas». Se trata de un demonio de rostro hinchado, coronado con una cinta de fuego, cornudo negro y amenazante, peludo y con alas de murciélago.

La gula es identificada con el exceso consumista e innecesario de comida y bebida.

Envidia (Leviatán). Es una bestia marina del Antiguo Testamento. La envidia se caracteriza por el deseo insaciable de obtener algo o alguien de otra persona y, por lo consiguiente, desear el mal.

Pereza (Belfegor). “El señor de la apertura” de aspecto atlético con unos cuantos metros de alto, cuernos de carnero y grandes patas de lobo. Se trata de un ser que seduce a la gente por medio de inventos ingeniosos que supuestamente generará riquezas. A pesar de su vinculación con el ocio, si se mira desde el punto de vista espiritual se refiere a una “tristeza de ánimo” que aparta al creyente de las obligaciones espirituales o divinas.

-De acuerdo a sus habilidades:

Demonios aéreos. Son responsables de las tormentas y vuelan en enjambres invisibles buscando entrar al mundo material para atacar los humanos.

Demonios terrestres. Son los más peligrosos debido a que pueden cambiar de formas y proyectar ilusiones. Sin el demonio terrestre muere no puede ser revivido y directamente es expulsado.

Demonios acuáticos. Habitan en ríos, mares y lagos. Su función es ahogar a los humanos. Generalmente son demonios femeninos.

Demonios subterráneos. Viven en el fondo de las tierras atacando a quienes interfiera en su camino (obreros de mina y buscadores de tesoros). Estos seres se caracterizan por ser maliciosos y moverse con lentitud, . Además de esto, cuentan con una apariencia híbrida, que combina armadura, carne y piedra. Estos demonios causan terremotos.

Demonios ígneos. Su lugar de hábitat es la oscuridad. No tienen interés por la humanidad. Atacan a las personas haciéndolas pecar.

Demonios íncubos y súcubos. Seres sobrenaturales que se encuentran en los sueños de las personas con la imagen de cuerpo real de una persona normal. Los íncubos (varones) y los súcubos (mujeres) son los encargados de fornicar con los soñadores. Allí está presente el pecado de la lujuria.

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